martes, 18 de marzo de 2014

Sobre la relación de objeto

La noción de falta de objeto no es negativa sino que motoriza la relación del sujeto con el mundo. J. Lacan considera que el complejo de Edipo es una estructura triangular en donde la función del padre hace operar un pasaje de lo imaginario a lo simbólico. En el triángulo edípico aparece el falo como tercer término, significante de la falta y referente de la diferencia de los sexos. De este modo, el sujeto debe enfrentar el problema de la diferencia sexual a través de tres tiempos lógicos.
El falo como terceridad, es el encargado de medir la diferencia sexual. En este recorrido, la función paterna actúa metafóricamente e impone la ley regulando el deseo. ¿Que es el falo?, el falo es un significante que designa los efectos del significado, revela la función del Otro como lugar simbólico en donde el sujeto se ubica bajo la forma de una división o “spaltung”. En este sentido, el falo da razón sobre el deseo del Otro; ya que el sujeto va a querer ese deseo.
El significante subvierte la necesidad sujetándola a la demanda de amor. El deseo entonces, es lo que la demanda de amor no llega a satisfacer.
En un momento inaugural, el Otro lee la necesidad del niño como demanda (desde su deseo). De este modo satisface la necesidad y a la vez lo libidiniza (amor). Lacan afirma que la demanda es siempre demanda de una presencia o ausencia, el Otro aparece con el privilegio de satisfacer necesidades y privar satisfacciones, pero no puede dar un amor incondicional, por esta razón el deseo se constituye como resto insatisfecho.
Lacan en el seminario IV, afirma que la relación de objeto depende de la relación que el sujeto mantiene con la falta. Lo que se ama en el objeto es lo que falta. Es así que la falta tendrá una escritura triple en el sujeto: castración, frustración y privación.
Por lo tanto, un objeto de amor es amarrado triplemente, su pérdida desencadena el inconsolable trabajo del duelo. Siguiendo en esta línea del objeto faltante, Lacan sostiene que se ama a ese objeto esencial que ocupa un lugar en la propia falta, en la medida en que causa el deseo.
Al final de su obra, Lacan teoriza la falta de objeto como falta de correspondencia entre el hombre y la mujer. Lo planteado anteriormente supone que entre el hombre y la mujer está la castración, la falta de objeto ideal. Luego, esta diferencia radical será planteada en términos de “no hay relación sexual” entre el hombre y la mujer.
Porque no hay objeto, buscamos  nuestros objetos. Porque no hay relación sexual, hacemos el amor.

J. Lacan. Seminario IV.
J. Lacan. La significación del falo.Escritos 2.
J. Lacan. Seminario X.
J. Lacan. Seminario XX.